Para poder efectuar un movimiento técnico correctamente tiene que haberse realizado el anterior con la misma perfección. La mayoría de los gestos inadecuados,en la entrada del la mano en el agua del estilo crol , vienen dados por un recobro mal ejecutado.
Los errores en la entrada suelen producir pocas alteraciones en la técnica y en los vectores propulsivos, por lo que son de poca importancia, pero también son fáciles de corregir con un poco de insistencia y los ejercicios adecuados.
El verdadero problema de una entrada incorrecta no es la entrada en si, sino los efectos posteriores. Si un nadador realiza una entrada inadecuada seguramente ha realizado un recobro imperfecto y realizara una fase de extensión o una fase de agarre también inapropiada. Los errores en la entrada, suelen ser errores por consecuencia.
Un recobro con el codo bajo (recobro lateral) imposibilita totalmente la ejecución, de la entrada en el agua de forma correcta. El recobro lateral provoca que la mano lleve una inercia hacia delante y hacia dentro, cuando la siguiente curva será hacia detrás y hacia fuera. Por lo que el nadador o tiene que parar la inercia de la mano, cosa que raramente hacen, o por el contrario dejan que la inercia provocada por el recobro lateral sea la que dirige la entrada de la mano en el agua. Al fin la mano entra en el agua con un movimiento predominante hacia dentro, cruzándose delante de la cabeza, aumentando así la fuerza de resistencia frontal debida a la forma . Esto a su vez provoca que el siguiente movimiento de la mano predomine la acción hacia fuera para colocar el brazo en lina con el hombro, provocando un desplazamiento lateral de la “T”. Normalmente el nadador corrige este desplazamiento con una patada hacia fuera del pie del lado contrario para mantener el equilibrio del desplazamiento.
Otro error técnico que podemos encontramos es la entrada de la mano en posición prona, esto provoca una alteración del medio mayor que una entrada en ángulo, y no debemos olvidar que lo que mas resistencia opone al avance de un nadador es el oleaje y formar oleaje delante del cuerpo sin razón es también un grave error técnico.
Asimismo es fácil observar una entrada de la mano con la muñeca en máxima flexión, introduciendo en el agua primero los dedos, estos mirando hacia abajo, y luego el resto del brazo. Esto produce un aumento significativo de la resistencia al avance debido a las turbulencias creadas delante de la cabeza por la fuerza de la corriente chocando contra el dorso de la mano. Además, al nadador le resultara imposible hacer eficaces las fases de extensión y de agarre, hasta que no haya extendido la muñeca y conseguido que la mano alcance mayor velocidad que la corriente. Perdiendo asi eficacia de la brazada.
Los errores en la entrada suelen producir pocas alteraciones en la técnica y en los vectores propulsivos, por lo que son de poca importancia, pero también son fáciles de corregir con un poco de insistencia y los ejercicios adecuados.
El verdadero problema de una entrada incorrecta no es la entrada en si, sino los efectos posteriores. Si un nadador realiza una entrada inadecuada seguramente ha realizado un recobro imperfecto y realizara una fase de extensión o una fase de agarre también inapropiada. Los errores en la entrada, suelen ser errores por consecuencia.
Un recobro con el codo bajo (recobro lateral) imposibilita totalmente la ejecución, de la entrada en el agua de forma correcta. El recobro lateral provoca que la mano lleve una inercia hacia delante y hacia dentro, cuando la siguiente curva será hacia detrás y hacia fuera. Por lo que el nadador o tiene que parar la inercia de la mano, cosa que raramente hacen, o por el contrario dejan que la inercia provocada por el recobro lateral sea la que dirige la entrada de la mano en el agua. Al fin la mano entra en el agua con un movimiento predominante hacia dentro, cruzándose delante de la cabeza, aumentando así la fuerza de resistencia frontal debida a la forma . Esto a su vez provoca que el siguiente movimiento de la mano predomine la acción hacia fuera para colocar el brazo en lina con el hombro, provocando un desplazamiento lateral de la “T”. Normalmente el nadador corrige este desplazamiento con una patada hacia fuera del pie del lado contrario para mantener el equilibrio del desplazamiento.
Otro error técnico que podemos encontramos es la entrada de la mano en posición prona, esto provoca una alteración del medio mayor que una entrada en ángulo, y no debemos olvidar que lo que mas resistencia opone al avance de un nadador es el oleaje y formar oleaje delante del cuerpo sin razón es también un grave error técnico.
Asimismo es fácil observar una entrada de la mano con la muñeca en máxima flexión, introduciendo en el agua primero los dedos, estos mirando hacia abajo, y luego el resto del brazo. Esto produce un aumento significativo de la resistencia al avance debido a las turbulencias creadas delante de la cabeza por la fuerza de la corriente chocando contra el dorso de la mano. Además, al nadador le resultara imposible hacer eficaces las fases de extensión y de agarre, hasta que no haya extendido la muñeca y conseguido que la mano alcance mayor velocidad que la corriente. Perdiendo asi eficacia de la brazada.
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